martes, 16 de diciembre de 2014

la honestidad

La honestidad
La honestidad (Del latín honestitas-atas 1 ) o también llamado honradez es el valor de decir la verdad, ser decente, recatado, razonable, justo, honrado y honesto. Desde un punto de importante es una cualidad humana que consiste en actuar de acuerdo como se piensa y se siente. Se refiere a la cualidad con la cual se designa a aquella persona que se muestra, tanto en su obrar como en su manera de pensar, como justa, recta e íntegra. Quien obra con honradez se caracterizará por la rectitud de ánimo, integridad con la cual procede en todo en lo que actúa, respetando por sobre todas las cosas las normas que se consideran como correctas y adecuadas en la comunidad en la cual,
Otra parte importante de la honestidad, es que puede entenderse como el simple respeto a la verdad en relación con el mundo, los hechos y las personas; en otros sentidos la honestidad también implica la relación entre el sujeto y los demás, y del sujeto consigo mismo.
En pocas palabras la honestidad consiste en: comportarse y expresarse con honestidad coherencia, sinceridad y respeto. Pero sin olvidar que tenemos que respetar estos dos valores importantes que no tenemos que olvidar justicia y verdad.
·         La honestidad según Confucio.
·         La honestidad es uno de los valores y componentes más importantes de una personalidad saludable con tu entorno y con los demás una buena comunicación está basada principalmente en no decir mentiras y ser siempre honesto de ahí la palabra "honestidad".

·         En su nivel más superficial, el Li, son todas aquellas acciones realizadas por una persona con objeto de construir la sociedad ideal, y destinadas a cumplir sus deseos, ya sea a corto plazo (mal) o a largo plazo (bien). Admitir que se busca la gratificación inmediata, con todo, puede contribuir a transformar un acto malo en uno peor, del mismo modo que ocultar las intenciones a largo plazo puede empeorar una buena acción. Un principio fundamental en esta teoría es la de que una buena persona debe mostrar sus sentimientos sinceramente en su rostro, de forma que facilite la coordinación de todos en la consecución de mejoras a largo plazo. Esta sinceridad, que abarca incluso a la propia expresión facial, ayuda a lograr la honestidad con uno mismo, y a que las actividades humanas resulten más predecibles, amigables y placenteras. En esta primera versión, la honestidad se logra buscando únicamente el propio beneficio.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario